Historia para Camilo

Camilo corrió hacia el bosque a toda prisa. Él sabía que no debía estar allí solo, pero no podía resistirse a la tentación de explorar el misterioso bosque encantado que había escuchado en las historias de su abuela. Cuando llegó al borde del bosque, se detuvo y miró a su alrededor. Era un lugar hermoso, con árboles altos y flores de colores brillantes. Pero algo extraño estaba sucediendo allí.

Uno de los árboles, llamado Greeny, parecía estar enfermo. Las hojas de Greeny estaban amarillas y caídas en el suelo. Camilo se acercó a Greeny y notó que había una mancha negra en el tronco. De repente, escuchó voces detrás de él. Se dio la vuelta y vio a dos niños de otro mundo, que también parecían preocupados por el estado de Greeny.

"Soy Leila, y él es Kian. Somos de otro mundo y estamos aquí para proteger este bosque encantado ", dijo Leila, señalando hacia Greeny.

Mientras hablaban, vieron a unos hombres en trajes de trabajo acercándose al bosque con hachas y motosierras en las manos. Los niños se dieron cuenta de que estos hombres eran parte de una empresa malvada que quería cortar todos los árboles del bosque para construir un centro comercial.

Los tres niños corrieron hacia los hombres, gritando y haciendo ruido para asustarlos. Los hombres se detuvieron y miraron a los niños con sorpresa. Camilo explicó que estaban allí para proteger el bosque y Greeny. Los hombres se burlaron de ellos y dijeron que no podían detenerlos.

Pero los niños no se rindieron. Trabajando juntos, encontraron una solución creativa para detener a la empresa malvada y salvar el bosque encantado.

Después de un largo día de trabajo, los tres niños se sentaron junto a Greeny, quien había empezado a recuperarse poco a poco. "Gracias por protegerme", dijo Greeny con gratitud.

Los niños sonrieron y se miraron uno al otro, sabiendo que habían hecho algo importante juntos. Y así comenzó una gran amistad y una aventura emocionante para salvar el bosque encantado.

Al día siguiente, Camilo, Leila y Kian decidieron hacer una caminata por el bosque encantado para asegurarse de que todo estuviera en orden y que los hombres malvados no hubieran vuelto. Pero cuando llegaron a la parte más profunda del bosque, se encontraron con una trampa gigante que parecía haber sido puesta allí para atrapar a Greeny.

Pero mientras intentaban liberar a Greeny, escucharon a los hombres malvados acercándose. Habían dejado a alguien para vigilar el área en caso de que los niños intentaran detenerlos de nuevo.

Los niños corrieron hacia unos arbustos cercanos y escucharon mientras los hombres hablaban sobre cómo iban a cortar a Greeny y llevarse su tronco para hacer muebles caros.

Los niños pensaron en una solución juntos. Decidieron que la única forma de detener a los hombres era hacerles creer que Greeny era un árbol mágico capaz de hacerles desaparecer para siempre si lo cortaban. Pero para que la idea funcionara, necesitaban la ayuda de los animales del bosque encantado.

Trabajando juntos, los niños lograron que un grupo de pájaros y otros animales vinieran a su rescate. Los animales hicieron un ruido estruendoso que parecía venir del árbol, y cuando los hombres lo escucharon, se asustaron y huyeron del bosque.

Cuando los niños salieron de su escondite, vieron que Greeny estaba a salvo y que los hombres malvados no volverían.

"Gracias por salvarme de nuevo", dijo Greeny, sus ramas moviéndose con la emoción.

Los niños sonrieron y se sintieron muy orgullosos de sí mismos. Habían aprendido que cuando trabajan juntos, pueden superar cualquier desafío, incluso si parecía imposible. Y así, se convirtieron en los nuevos protectores del bosque encantado y Greeny, su nuevo amigo.

Los niños regresaron a casa y contaron todo lo sucedido a sus padres. Los adultos escucharon con asombro la historia de cómo sus hijos habían salvado al bosque encantado y a su habitante más preciado, Greeny.

Incluso los medios de comunicación se enteraron de lo que había sucedido, y los niños se convirtieron en pequeñas celebridades. Los reporteros les hicieron preguntas sobre cómo lograron detener a los hombres malvados y salvar a Greeny.

Pero lo más importante para los niños fue que habían aprendido lo valioso que es cuidar de la naturaleza y proteger a las criaturas que la habitan. Prometieron trabajar duro para asegurar que el bosque encantado y sus amigos estuvieran seguros para siempre.

Y así, cada vez que los niños visitaban el bosque encantado, disfrutaban de la belleza de la naturaleza, rodeados de amigos peludos, plumosos y escamosos. Mientras tanto, Greeny seguía creciendo, más fuerte y saludable que nunca antes, agradecido por la amistad y la valentía de sus protectores.