Historia para Luzia
Título: La jardinería mágica de Cinderella

Capítulo 1: La aventura de Luzia
Había una vez una pequeña niña llamada Luzia, ella tenía cuatro años y le encantaba jugar en el jardín. Un día, mientras jugaba, vio a Cinderella corriendo hacia el bosque. Luzia estaba muy sorprendida, nunca antes había visto a Cinderella tan apurada.
Luzia tuvo curiosidad y decidió seguir a la hermosa princesa hasta que llegaron a un lugar muy especial: un jardín secreto escondido entre los árboles. El jardín era mágico, y cada flor y planta brillaba con una luz especial.
Cinderella parecía preocupada por las plantas, así que Luzia se acercó y le preguntó: "¿Qué pasa? ¿Hay algo mal con las flores?"
Cinderella respondió: "Sí, estas flores están enfermas. Necesitan amor y cuidado para volver a estar saludables."
Luzia se preguntó cómo podrían ayudar a las flores. Cinderella le explicó que cuanta más gente cuide y ame el jardín, más flores crecerían y más felices estarían.
Entonces, Luzia decidió ayudar. Comenzó a regar las plantas y a cantarles canciones. Con cada día que pasaba, las plantas comenzaron a crecer fuertes y saludables. Luzia estaba muy feliz de haber ayudado a Cinderella y al jardín mágico.
Cinderella agradeció a Luzia por su ayuda y le prometió que siempre sería bienvenida en el jardín secreto. Y así, Luzia aprendió el valor del amor y el cuidado por la naturaleza, y siempre recordaría su aventura en el jardín mágico junto a Cinderella.

Capítulo 2: El hechizo oscuro
Un día, cuando Luzia y Cinderella llegaron al jardín secreto, descubrieron algo terrible. Una planta que antes había sido hermosa y fuerte, ahora estaba marchita y oscura. Cinderella se acercó a la planta, la tomó con cuidado y examinó sus hojas.
- Esto es un trabajo de magia oscura -dijo Cinderella con un tono preocupado-. Alguien ha lanzado un hechizo para marchitar la planta.
Luzia estaba asustada. ¿Qué podrían hacer para resolver el problema? Cinderella dio un suspiro profundo y comenzó a pensar. Entonces se volvió hacia Luzia con una sonrisa.
- Tengo una idea -dijo Cinderella-. Debemos encontrar los ingredientes para un contrahechizo. Pero necesitaremos viajar lejos para conseguirlos. ¿Te gustaría unirte a mí en esta aventura, Luzia?
Luzia asintió con entusiasmo, no podía esperar para ayudar a que el jardín volviera a estar sano.
Juntas, Cinderella y Luzia viajaron a través de bosques y ríos, buscando los ingredientes necesarios para el contrahechizo. A lo largo del camino, se encontraron con muchos desafíos, como puentes rotos y criaturas peligrosas. Pero con valentía y determinación, Cinderella y Luzia lograron superar cada uno.
Finalmente, llegaron a una cueva oscura donde encontraron el último ingrediente. Pero justo cuando estaban a punto de salir de la cueva, escucharon un ruido detrás de ellos. Una bruja malvada había estado siguiéndolos todo el tiempo.
La bruja se rió y levantó su varita, apuntando hacia Cinderella y Luzia. Pero justo cuando parecía que todo estaba perdido, las plantas del jardín secreto comenzaron a brillar con una luz cálida y reconfortante. La bruja quedó desconcertada y se alejó, sorprendida por la magia de las plantas.
Cinderella y Luzia regresaron al jardín secreto con los ingredientes para el contrahechizo. Juntas, trabajaron para preparar la poción y aplicarla a la planta enferma. Poco a poco, las hojas comenzaron a reverdecer y la planta empezó a recuperarse.
Luzia estaba muy feliz de haber ayudado a salvar una de las plantas del jardín secreto. Y Cinderella estaba muy orgullosa de su joven amiga. Juntas, prometieron siempre cuidar y proteger el jardín secreto, y asegurarse de que nunca volviera a ser amenazado por la magia oscura.
De repente, el cielo se iluminó con un arco iris. Luzia y Cinderella miraron con asombro mientras los colores cálidos inundaban el jardín secreto. Mientras el arco iris se desvanecía, Luzia notó que todas las flores y plantas del jardín estaban en flor y parecían más brillantes y majestuosas que nunca.
- ¡Mira, Cinderella! -dijo Luzia mientras señalaba emocionada todas las flores-. ¡Están todas en flor! ¡Es hermoso!
- Sí, es hermoso -dijo Cinderella con una sonrisa-. Este es el poder del amor y el cuidado. Cuando cuidamos y amamos algo, crece y florece.

Luzia asintió con una sonrisa y se acercó a Cinderella para darle un abrazo.
- Gracias por enseñarme eso, Cinderella -dijo Luzia-. Nunca olvidaré cómo cuidar y amar el jardín secreto.

Cinderella sonrió y abrazó a Luzia de vuelta.
- Siempre estaremos juntas para cuidar y proteger el jardín secreto -dijo Cinderella-. Y nunca nos rendiremos en la lucha contra la magia oscura.
Luzia sonrió y asintió con entusiasmo.
- ¡Nosotras siempre juntas, Cinderella! -dijo Luzia con una sonrisa radiante-.
Las dos amigas se sentaron juntas en el jardín secreto, admirando la belleza a su alrededor. Y aunque habían enfrentado muchos desafíos en el camino, sabían que siempre podrían superar cualquier cosa si trabajaban juntas y se cuidaban mutuamente.