Historia para Damian

En la ajetreada ciudad donde vivía el pequeño Damian, junto a su madre Fani y su padre Ricardo, la vida siempre era una gran aventura. En esta ciudad mágica, conocida solo como "Su Casa", cada día era un descubrimiento nuevo para Damian. Damían, a pesar de ser tan chiquito, tenía una fascinación muy grande: la electricidad.

Un día, una figura alta y misteriosa llegó a la ciudad con un brillo en los ojos y un aire emocionante. Era Nikola Tesla, el brillante inventor. Cuando Damian lo vio, supo de inmediato que este hombre traía consigo el fascinante mundo de la electricidad.

Nikola Tesla, con una amplia sonrisa, comenzó a mostrar sus sorprendentes inventos. Describió las maravillas de la corriente alterna y el poder de su famosa bobina de Tesla, cautivando a su joven audiencia. Damian estaba al borde de su asiento, sus ojos llenos de asombro.

Pero pronto, un problema surgió. La bobina de Tesla, la más asombrosa de todas sus invenciones, de repente dejó de funcionar. Los niños estaban decepcionados y Tesla parecía preocupado. Damian, animado por su madre Fani y su padre Ricardo, decidió que él tenía que ayudar.

Damian, con su pequeño corazón lleno de valor, se acercó a Tesla. Juntos, comenzaron a trabajar en la bobina. Tesla, impresionado por el entusiasmo de Damian, le enseñó cómo funcionaba la bobina y cómo podían arreglarla. Damian, con su pequeña mano, hizo el último ajuste que devolvió la vida a la bobina de Tesla.

El destello de luz que la bobina de Tesla produjo fue tan fuerte que pareció iluminar toda la ciudad de "Su Casa". Damian y Tesla se rieron, y el resto de los niños aplaudieron, maravillados por el espectáculo de luces.

Después de ese día, la vida en "Su Casa" se volvió aún más mágica. Nikola Tesla, agradecido por la ayuda de Damian, decidió quedarse unos días más para enseñar a Damian y a los demás niños sobre la electricidad y sus maravillas. Fani y Ricardo estaban orgullosos de Damian, y él estaba feliz de haber podido ayudar.

La historia de Damian y Tesla se convirtió en la leyenda de "Su Casa", un relato de valentía, curiosidad y el poder de la electricidad. Y Damian, a pesar de ser todavía tan chiquito, había aprendido algo muy valioso: no importa cuán grande puedas ser, siempre tienes el poder de hacer una gran diferencia. Y cada vez que veía una luz brillante, Damian sonreía, recordando su aventura con Nikola Tesla.