Historia para Marfran

Marfran era un dinosaurio T-Rex de cinco años de edad. Le encantaba jugar, explorar y descubrir cosas nuevas. Un día mientras jugaba en el bosque, escuchó un ruido extraño y decidió investigar.

Intrigado, Marfran se acercó sigilosamente a la fuente del ruido. Allí, se encontró con un ser extraño que nunca había visto antes. Era alto y delgado, con ojos grandes y brillantes, y su cuerpo estaba cubierto de un extraño material plateado y brillante.

El extraterrestre estaba herido y parecía asustado. Sin pensarlo dos veces, Marfran se acercó para ayudarlo. A medida que se acercaba, el ser comenzó a cambiar de forma. De repente, se convirtió en una pequeña ardilla que temblaba de miedo.

Marfran se sorprendió por este cambio repentino, pero se dio cuenta de que el extraterrestre era un cambiaformas. Con mucho cuidado, levantó a la ardilla herida y la llevó a casa.

A medida que el extraterrestre se curaba, Marfran lo ayudaba a recuperarse. Pronto, aprendió más sobre la extraña criatura y comenzó a entender su historia. El extraterrestre había perdido su camino y ahora estaba atrapado en la Tierra.

Marfran sabía lo que debía hacer. Acompañó al cambiaformas a través del bosque y lo ayudó a encontrar su camino de regreso a casa. Agradecido, el extraterrestre cambió de forma una última vez, convirtiéndose en una pequeña mariposa y desapareció en el cielo.

Marfran se sintió feliz y satisfecho consigo mismo. Sabía que había hecho lo correcto al ayudar al extraterrestre. A partir de entonces, prometió ser siempre amable y ayudar a los necesitados.

Mientras Marfran regresaba a casa, notó que los árboles y plantas del bosque estaban comenzando a marchitarse y morir. Al buscar la causa, vio a un grupo de hombres en trajes protectores rociando un químico tóxico en el suelo. Marfran se dio cuenta de que las criaturas del bosque estaban gravemente afectadas por la sustancia y debían ser salvadas.

Marfran sabía que debía actuar rápidamente. Corrió hacia los hombres para intentar detenerlos, pero no lo escucharon. Decidió contactar a sus amigos animales para que lo ayudaran.

Juntos, Marfran y sus amigos crearon un plan para detener a los hombres y salvar el bosque. Crearon una distracción y Marfran corrió hacia los hombres, agarrando la manguera y apagando la sustancia química. Los hombres, desconcertados, huyeron cuando vieron que no podrían continuar con su plan.

Marfran y sus amigos trabajaron arduamente para limpiar el bosque de cualquier rastro de la sustancia tóxica. Cuando terminaron, se acostaron en el bosque, agotados pero satisfechos.

De repente, Marfran se sorprendió al ver al extraterrestre cambiante nuevamente frente a él. El ser agradeció a Marfran y sus amigos por su valentía y amabilidad, y le otorgó el poder de cambiar de forma como él. Marfran estaba asombrado, pero feliz de tener un nuevo amigo con habilidades especiales como él.

Desde ese día en adelante, Marfran continuó sus aventuras con su nuevo amigo extraterrestre y sus amigos animales. Sabía que siempre debía ser amable y cuidar el mundo que lo rodeaba.

Marfran y sus amigos pasaron mucho tiempo jugando juntos y cuidando del bosque. El extraterrestre cambiante se convirtió en un buen amigo y siempre estaba dispuesto a ayudar a cualquier criatura necesitada. A veces, incluso se unía a Marfran y su amigos en sus juegos.

Con el tiempo, el bosque se recuperó y las criaturas que habían estado afectadas por la sustancia tóxica también se recuperaron. Marfran y sus amigos se aseguraron de cuidar bien el bosque y protegerlo de cualquier otra amenaza.

Marfran aprendió una gran lección sobre la importancia de ser amable y ayudar a los demás, sin importar de dónde vengan. También aprendió que tener amigos y trabajar juntos puede hacer una gran diferencia en el mundo.

Al final, Marfran se sintió muy agradecido por la aventura que había tenido y por conocer al extraterrestre cambiante, quien se convirtió en un amigo para toda la vida. La amistad que construyó duraría para siempre y juntos continuarían ayudando a cualquier criatura necesitada y cuidando el mundo que los rodeaba.